¿Cómo ve a Dios?

"Creo que esto no se acostumbra: dejar cartas abiertas sobre la mesa para que Dios las lea... Necesito hablar y confiarme... Quiero creer que ... mi carta no flotará en el vacío, abierta y sola, como sobre un mar inexorable..."

Juan José Arreola,
El Silencio de Dios (Confabulario).

Usted ¿Cómo ve a Dios? me preguntó un hermano (nunca he sabido porque el "ambiente pastoral" produce en tantas personas esa "solemnidad del Usted")... ¿Cómo? respondí mientras trataba de imaginar a que se refería. Si, -continuó mi hermano- cuando usted ora ¿Cómo ve a Dios? Cuando yo cierro los ojos veo a un ser gigante, tan alto que no puedo ver su cara, me pongo de rodillas ante él y oro... ¿Cómo veo a Dios cuando oro? -repetí la pregunta- ¡No lo veo! solo siento su presencia que me rodea en amor.

¿Como veo a Dios cuando oro? pienso... Orar es como cuando recibes un abrazo en el momento de más necesidad, orar no solo son las palabras que tu diriges a Dios, sino los silencios que haces para escuchar su respuesta... A través del día solo comienzo a platicar con él y mientras voy abriendo mi corazón hago un pausa en mis palabras para sentirme rodeado de su amor; Se que Dios es grande y magnífico pero no puedo verle como alguien lejano de rostro desconocido, ¡Su presencia me acompaña cada minuto! ¿Cómo podría ser un desconocido para mi?

Cuántas personas hay en el mundo para quienes Dios es solo "el tipo en el cielo" lejano a nosotros, Cuántas personas buscan una respuesta y sienten que no la reciben, porque su corazón esta lejos de Dios... ¡Debemos compartir con los demás la preciosa presencia de Dios en Jesucristo!

¡Que podamos disfrutar la presencia de nuestro Padre celestial cada día!

"Señor, enséñanos a orar..."

Los discípulos a Jesús