Curioso, muchos de nosotros decimos "Dios es bueno" cuando las cosas salen como nosotros esperamos o queremos pero... ¿Qué diríamos si las cosas van mal?
El amor de Dios no se manifiesta en algunas circunstancias particulares, ¡Dios es amor! El amor de Dios no depende de nuestras acciones ( no nos ama más si "nos portamos bien" o menos si "hacemos el mal") Simplemente ¡Él nos amó primero!
Pensando en esto encontré hace unos días estas palabras de Wayne Jacobsen:
"Por mucho tiempo hemos deshojado nuestras margaritas, muchos de nosotros continuamos jugando este juego con Dios. En nuestro caso no arrancamos pétalos de margarita, pero probamos a través de nuestras circunstancias para imaginarnos cómo se siente Dios en relación a nosotros exactamente.
Me dieron un aumento. Me ama.
No me dieron el ascenso que esperaba, o peor aún, perdí mi trabajo. ¡No me ama!
Algo en la Biblia me inspiró hoy. ¡Me ama!
Mi hijo está seriamente enfermo. ¡No me ama!
Le di dinero a alguien en necesidad. ¡Me ama!
Permití que mi ira me dominara. ¡No me ama!
Algo por lo que estaba orando sucedió como oré. ¡Me ama!
No fui completamente honesto para salirme de una situación comprometedora. ¡No me ama!
Un amigo me llama inesperadamente para animarme. ¡Me ama!
Mi auto necesita una transmisión nueva. ¡No me ama!"
El amor de Dios no se manifiesta en algunas circunstancias particulares, ¡Dios es amor! El amor de Dios no depende de nuestras acciones ( no nos ama más si "nos portamos bien" o menos si "hacemos el mal") Simplemente ¡Él nos amó primero!
Pensando en esto encontré hace unos días estas palabras de Wayne Jacobsen:
"Por mucho tiempo hemos deshojado nuestras margaritas, muchos de nosotros continuamos jugando este juego con Dios. En nuestro caso no arrancamos pétalos de margarita, pero probamos a través de nuestras circunstancias para imaginarnos cómo se siente Dios en relación a nosotros exactamente.
Me dieron un aumento. Me ama.
No me dieron el ascenso que esperaba, o peor aún, perdí mi trabajo. ¡No me ama!
Algo en la Biblia me inspiró hoy. ¡Me ama!
Mi hijo está seriamente enfermo. ¡No me ama!
Le di dinero a alguien en necesidad. ¡Me ama!
Permití que mi ira me dominara. ¡No me ama!
Algo por lo que estaba orando sucedió como oré. ¡Me ama!
No fui completamente honesto para salirme de una situación comprometedora. ¡No me ama!
Un amigo me llama inesperadamente para animarme. ¡Me ama!
Mi auto necesita una transmisión nueva. ¡No me ama!"
180x6: Día a día en el Camino.
3 comentarios:
Ciertísimo, Perro.
Cuando nos va de la fregada cuesta mucho trabajo decir, aunque sea entre dientes... "Dios es bueno... y además, me ama..."
Caray, si nos basáramos en las cosas lindas que nos suceden, si usáramos lo que nos rodea como termómetro de su amor... ¿qué podríamos decir de Pedro, de Pablo... y de muchos otros fieles seguidores de la fe que vivieron del nabo en algunas (muchas) ocasiones? nombreee! segurito Dios no los amaba tanto... pero no, qué bueno que el amor de Dios siempre es el mismo.
Me encanta este tema, Perro, y me encanta como escribes acerca de ello.
Abrazos a Chocolatosa y a ti!
Bendiciones!! Lindoooo mensaje!!
Espero ponernos
en contacto atraves de Sellados por Cristo
http://selladoosxcristo.blogspot.com
Te esperamos ;)
¡Vaya! Muy cierto lo que escribes. Hay que seguir el ejemplo de Job.
Saludos.
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